El primer festejo copero

El Negro delira de alegría.

Boca venció por 1 a 0 a Cienciano, en el debut como local de la Copa Libertadores de América. De esta manera, el Xeneize logró la primera victoria (en la primera fecha igualó 0 a 0 ante Bolívar, en La Paz) del certamen y quedó como uno de los líderes e invicto del grupo 7 tras disputarse la segunda fecha. El partido se jugó en la cancha de San Lorenzo.

Nuestro equipo salió a presionar desde el primer minuto y no le dio respiro al conjunto peruano, que se vio avasallado durante la etapa inicial.

A 8 minutos del comienzo, el mediocampista Sergio Orteman tuvo en su cabeza la primera situación clara para abrir el marcador. Tras un error del arquero peruano Flores, Palermo pescó el balón y envió un centro al área. El uruguayo gana en el salto y su testazo es contenido por el arquero.

Dos minutos más tarde, Marioni, quien reemplazó al lesionado Palacio, se impone en el juego áereo pero su cabezazo encuentró bien ubicado otra vez al "1" de Cienciano.

Boca ya merecía hasta aquí contar al menos con la ventaja mínima, pero fallaba en el último toque. Faltaba afinar la puntería.

A los 19, una excelente maniobra individual del delantero Bruno Marioni, quien se sacó un hombre de encima, ingresa al área, pero su remate se fue por encima del travesaño.

Y las situaciones de peligro para nuestro equipo se sucedían una tras otra. El volante de Boca Neri Cardozo enganchó, eludió al arquero pero se demoró en el pase.

A los 28, Otra vez Marioni desequilibra con su explosiva velocidad, pero su toque de zurda, ante la salida del arquero, pasó cerca del palo derecho.

Riquelme, preciso y activo, manejó todos los avances de Boca con gran inteligencia y calidad. Sólo faltaba el gol.

Y así se fue el primer tiempo....

El segundo tiempo fue un espejo del primero. Boca tomó la iniciativa y presionó la salida del rival, un equipo tibio, conservador, pero ordenado y firme en defensa.

A los 12, Marioni, como en toda la noche, y por quinta vez, lideró un ataque. Bruno eludió a un defensor, enganchó, pero su remate se fue por encima del arco.

Cuatro minutos más tarde, y por derecha, por enésima vez, el volante Guillermo Marino (reemplazó a Orteman) se proyectó con libertad, pero quiso ganar en velocidad y sacó un remate muy exigido que se fue afuera. Una nueva chance desperdició Boca.

A los 23, otro cabezazo del delantero Martín Palermo, dentro del área, de pique al suelo, se fue desviado por el segundo palo. Increíble. Nuestro equipo intentaba por abajo, por arriba, por los costados, pero no encontraba precisión en el último toque. Pero seguía insistiendo.

Y por fin el maleficio se rompió. A diez minutos para el final, Cardozo ejecutó un córner desde la derecha. La tocó suave hacia atrás para Ibarra, quien sin marca, libre, sacó un zapatazo remate de media distancia que se le coló en el ángulo del segundo palo del arquero, que intentó despejar con el brazo izquierdo, pero no puedo llegar.

Merecido triunfo. Buscado con alma y vida. Sacrificio que por suerte dios sus frutos. Primera victoria de Boca en la Copa para liderar, junto a Bolívar, con cuatro puntos, el grupo 7.